Seguro que muchos habrán visto Perdidos en la Tribu, un programa del que nos quedamos con muchas imágenes y experiencias y todas las familias han podido ganar mucho en cuanto a una experiencia valiosa, porque estar con una tribu no es algo que todos puedan hacer y siempre se aprende muchas cosas, se valora lo que tienes en tu casa y de seguro que a la vuelta, estas personas podrán tener cosas que contar a sus hijos o nietos, porque convivir con una tribu ha sido emocionante.

Gracias al éxito del programa, se buscan familias para la segunda edición, así que de seguro que podremos ver nuevas tribus de otras partes del mundo. La tribu de Namibia y el resto de tribus han aceptado a sus familias, porque han colaborado y han comenzado a vivir como ellos, algo muy complicado para unas personas que vivían cómodamente en sus casas y que de repente se han visto cazando y comiendo criaturas, que no siempre han sido muy sabrosas. Ahora llega el momento de partir y ciertamente será duro volver a sus casas, a sus costumbres y a la “Civilización”.

Sin duda alguna el premio en metálico es lo de menos, porque la experiencia de vivir con una tribu en Namibia, vivir como ellos, comer lo que ellos comen y hacer todo lo que ellos hacen, además de tener que intentar comunicarse sin hablar el mismo idioma, ha sido una experiencia vital muy importante, que no todos soportarían, porque nuestra vida es más o menos cómoda, pero ellos se tienen que ganar el alimento día a día y eso es ciertamente muy duro, como hemos podido ver.